A la sombra del Risco Blanco

Preciosa y conocida era en la falda del Roque de Imoque y Los Brezos.

Característico puente de piedra que cruza el Barranco de Las Goteras.

Se trata de varios individuos de gran porte situados en una zona con fayas y brezos viejos. Les cuelgan usneas y musgos. Los acebiños están trifurcados y presentan numerosos chupones.

Situado a unos 100 metros sobre el sendero PR 35.2 (Ruta del agua).Tiene dos pernadas. Se encuentra en una zona de difícil acceso.

El ámbito delimitado por el BIC acoge el área fundacional del núcleo de Arona, cuyos orígenes se remontan al momento de la fundación de la primitiva ermita, erigida en honor a San Antonio Abad por Antón Domínguez "el Viejo" en 1625, que posteriormente se reforma y amplía en 1796 y a principios del siglo XIX. Destacan en el conjunto las casas señoriales que rodean la parroquia, y su trazado de calles con calzada adoquinada que le otorga la calidad de uno de los mejores núcleos conservados de la isla.

Ruinas de construcción en piedra donde vivían los ganaderos de la zona.

Levantada en el siglo XIX junto a los cipreses de la plaza de la Iglesia de San Pedro Apóstol, actualmente cumple la función de casa parroquial.

Árboles de elevada altura pero poca frondosidad. El perímetro del primero es de 6,15 metros, y el del segundo es de 4,9 metros. Las alturas son de aproximadamente 25 y 20 metros respectivamente.

Jardín integrado dentro del Parque Nacional del Teide que ocupa una parcela de 4 hectáreas y ha sido creado para exponer, interpretar didácticamente, investigar y reproducir la flora autóctona de la zona.

La iglesia de San Pedro de Vilaflor o Chasna es heredera de una historia que se remonta a principios del siglo XVI, ya que su fundación responde a los anhelos piadosos de Pedro Soler y Juana Padilla, su mujer. A dichos propietarios, los más importantes del pueblo y de la comarca en que habitaron de modo continuo, se debe la erección de una primera ermita en torno al año 1530. No sería elevada a parroquia hasta 1568, incluyendo en su amplio partido jurisdiccional durante más de dos siglos a buena parte de los pueblos existentes en los actuales municipios de Vilaflor, Arona, San Miguel,  Granadilla y Arico. De esa primera construcción apenas han perdurado testimonios artísticos, aunque sí lo ha hecho la efigie titular de San Pedro: una importante pieza de alabastro blanco que firmó en la peana el escultor aragonés Pedro Villar.

En el casco histórico de Arona se encuentra un ejemplar de almácigo centenario, con una altura de nueve metros, que está incluido en el Libro de Árboles Monumentales de Tenerife. Este árbol es uno de los elementos del escudo heráldico del municipio, por lo que forma parte de su patrimonio cultural. Existen otros almácigos en Arona, al borde de la carretera que sube hacia Vilaflor.

La ermita de San Roque fue construida a principios del siglo XVII y está situada en una colina desde la que se otea el casco del pueblo. Con suelo de losa chasnera se compone de una sola nave y cubierta a dos aguas.

Conjunto de cipreses que se encuentran en la Plaza de la Iglesia de San Pablo Apóstol.

Es un enorme pino padre conocido como referencia del lugar, destacando sobre otros pinos de gran talla. Es el ejemplar más viejo de la zona rodeado de bosque mixto. De sus ramas cuelgan líquenes dándole un aspecto fantasmal. Presenta una gran rama lateral hacia la pista de Los Órganos y aunque su acceso no es recomendado, su copa puede verse desde la pista de Los Órganos.